jueves, 18 de enero de 2018

Porque tú eres importante simplemente por ser tú


En esta ocasión quería compartir con vosotros las palabras que dije en el X Aniversario de la asociación Música sin Barreras, que tanto me ha dado, cuyo lema es, precisamente, "porque tú eres importante simplemente por ser tú". 

"Buenas tardes a todos los que estáis aquí para conmemorar este décimo aniversario de la asociación Música sin Barreras. Pero, me pregunto yo y quizás alguno de vosotros ¿qué estamos celebrando exactamente aquí? Decía el filósofo Nietzsche que “sin música la vida sería un error” Si esto se llama Música sin Barreras, ¿celebramos, pues, la música? ¿Ese lenguaje mágico que nos permite decir y compartir lo que las palabras a veces no consiguen? Pues no, no estamos celebrando la música, sino algo mucho más grande: las personas. Porque Música sin Barreras es, sobre todo, un espacio de encuentro, donde diferentes personas compartimos nuestra vida y nuestra ilusión. La música es un medio para ello, y es un gran medio, pero no es el fin de este grupo: lo principal es construir un espacio para disfrutar y compartir. 

jueves, 31 de agosto de 2017

¿Por qué me caso?

Un mes. Solo un mes. Es el tiempo que queda hasta el gran día, el día de mi boda. Tantos preparativos, tantas ideas y momentos ilusionantes, tantos quebraderos de cabeza, etc., y ya está aquí. Un paso de los importantes, de los que marcan una vida. Una apuesta de all-in, una aventura que se inicia quemando los barcos, una promesa de eternidad. Ante todo esto, la gran pregunta a la que quiero dar una modesta respuesta y compartirla con vosotros: ¿por qué me caso? Por dos razones: porque quiero y porque me llama. 

martes, 8 de agosto de 2017

¿Estamos más cerca de lo que pensamos de un apocalipsis zombi? Reflexión sobre la terrible actividad de matar el tiempo

Puede que el título suene un poco alarmista ya que nadie espera realmente ver a la vuelta de la esquina un grupo de seres cual cáscaras humanas más o menos desvencijadas de gustos culinarios muy cercanos a los de Hannibal Lecter. En realidad, yo tampoco lo espero. No obstante, sí que tenemos en el aire una amenaza zombi de otro tipo: la conducta zombi. ¿En qué consiste esta conducta zombi? Precisamente, en una actitud fundamental que es ver la vida como algo que consumir, que fagocitar. Los zombis quieren, literalmente, absorber la vida —no en vano son conocidos por alimentarse a bases de cerebros humanos—, la ven como algo que consumir, algo que hay que gastar. Un zombi no disfruta de la vida sino que la consume desesperadamente, y es por eso por lo que se les considera como muertos en vida más que como seres auténticamente vivos. El zombi es, ante todo, un consumista nato, nunca queda saciado del todo, es una pura ansia. Y como es pura ansia no disfruta, porque toda su vida es ansiar devorar lo vivo pero cuando lo devora sigue ansiando, así que nunca vive propiamente la vida.

lunes, 10 de julio de 2017

El secreto de la vida es entregarla

Esta entrada nace de una experiencia que me ha marcado profundamente: los días que he pasado en el barrio de Nazaret en Valencia realizando un campo de trabajo con niños en el Colegio de Nuestra Señora de los Desamparados del 1 al 8 de julio de 2017. Allí, la mitad del día consistía en acompañar a cerca de noventa niños y niñas de tres a doce años: comenzábamos dando de desayunar a aquellos que lo necesitaban, después un rato de apoyo escolar, talleres y juegos, guerra de agua y para finalizar, dábamos de comer a aquellos que tenían necesidad de ello. Se puede decir sin exagerar, que la situación de estos niños es de la más difíciles que yo he conocido: muchas familias rotas o desaparecidas, drogas (consumo y tráfico), maltrato, abandono, pobreza y otros muchos factores hacían que estas personas de solo unos años de vida hubieran sufrido más que lo que cualquiera de los que fuimos ahí como voluntarios. Sin embargo, lo que se respiraba en ese colegio no era amargura y dolor, sino un profundo amor. Los abrazos y las expresiones de cariño eran continuas y de una intensidad que desarmaba el corazón más parapetado. Son miles las experiencias y situaciones vividas en esos días y son imposibles de transmitir no ya todas en su conjunto, sino ni siquiera solo una de ellas con un mínimo de lo que supuso al vivirla, pero me gustaría mostrar algunos retazos de estas vivencias, para iluminar lo más importante que yo aprendí allí.

jueves, 27 de abril de 2017

Soy libre cuando amo

Creado por Marco Nabi / Animado por Rexisky
(tomado de Art is a way of survival)
La semana pasada tuve la ocasión de compartir con los alumnos de segundo curso del Grado en Filosofía de la Universidad de Navarra una sesión. El profesor Jaime Nubiola me invitó a hablarles sobre tecnología y humanidad, en concreto sobre cómo nos afecta la tecnología. Sin embargo, no es de eso de lo que quiero hablar en este post. El origen del post es una pregunta que me lanzó el profesor Nubiola: ¿cómo afecta la tecnología a nuestra libertad: la potencia o la limita? Tuve que decir que no tenía una respuesta corta que ofrecer, y como el tiempo apremiaba, no hubo ocasión para una respuesta larga. No obstante, al momento brotó en mí como un grito rebelde una respuesta corta y contundente, si bien algo desconectada de la pregunta (al menos en apariencia): “soy libre cuando amo”. 

miércoles, 12 de abril de 2017

Nunca somos del todo nosotros mismos: un poco de antropología cuaresmal


Nunca somos del todo nosotros mismos. Nunca. Me dirás “pues yo estoy harto de oír que sea yo mismo, ¿cómo puedes decir qué es imposible lograrlo?”. Es cierto, la lógica de la autenticidad se ha instalado en nuestra sociedad, en gran medida absorbida por el mundo de la publicidad, la cual tiene una sofisticada habilidad en coger realidades humanas profundas y convertirlas en cebo para consumidores despistados —y no tan despistados—. No obstante, es pertinente matizar que esta máxima no es precisamente nueva, pues ya el Oráculo de Delfos recogía este mandato de “conócete a ti mismo”. De hecho, más bien habría que decir que este inconformismo con lo que cada uno somos es una actitud profundamente humana.

jueves, 2 de marzo de 2017

“Te volvería a decir que sí un millón de veces” Filosofando desde la taza del desayuno

Es bueno hacer las cosas que pensamos, por aquella gran verdad que glosa mi admirado filósofo Gabriel Marcel diciendo “quien no vive como piensa termina pensando como vive”. Por eso, en un blog de filosofía donde se reivindica pensar desde la vida, sería una incoherencia no anclar algunas reflexiones en elementos tan cotidianos como puede ser una taza de desayuno. En mi taza del desayuno (no en la de otro, lo de pensar sobre la vida no casa muy bien con la tercera persona) está escrita la siguiente frase: “Te volvería a decir que sí un millón de veces”. Suena inspirador, como tantas de esas frases motivadoras que está de moda poner en objetos como tazas, cuadernos, etc. No obstante, más allá de esta impresión inicial, esta frase encierra una gran verdad: la decisiones importantes no se dejan de tomar nunca.

lunes, 6 de febrero de 2017

Homo hominis lupus: La supremacía del “homo competitor”


Homo hominis lupus aunque pudiera parecer un hechizo del popular mago Harry Potter, es en realidad una conocida afirmación del filósofo inglés Thomas Hobbes que significa “el hombre es un lobo para el hombre”. Traducido: no te fíes ni de tu sombra, los otros son depredadores lobunos que en el mejor de los casos se pondrán la socorrida piel de cordero para pasar desapercibidos y poder aprovecharse de ti en cuanto bajes la guardia. Así, la sociedad y la convivencia solo son posibles por el miedo a las represalias, ya sean explícitas o implícitas. Las más evidentes son las primeras —los castigos por robo, agresión, etc.— que impiden que el hombre haga lo que en su fondo lobuno anhela: pasar por encima de quien sea para lograr su propósito. Pero también existen represalias más sutiles, como la reputación y la imagen que proyectamos: nadie quiere a priori ser tomado por un desaprensivo violento y egoísta. 

viernes, 13 de enero de 2017

Buscando el paraíso: ¿desde fuera o desde dentro?

En estos últimos meses he tenido la oportunidad de confirmar algo que venía viendo desde hace tiempo: hay en muchas personas ganas de cambiar el mundo, de conseguir que lo que nos rodea sea un poco más justo, más bueno, más bello. Tanto como monitor de tiempo libre como en mi primera experiencia como profesor universitario he encontrado jóvenes con una llama en el corazón, una llama de inquietud e inconformismo, que arde y en su arder busca con pasión caminos y medios para que ese cambio a un mundo mejor sea posible. Aunque siempre hay excepciones, creo que en la mayor parte de las ocasiones no se trata de una mera queja de lo mal que está el mundo, una especie de resentido desencanto que lo ha dado por perdido, sino que late por debajo una cierta esperanza de que no está todo perdido. No siempre es visible, pero un corazón que verdaderamente arde por la injusticia no ha podido perder la esperanza, por más que vea las cosas muy negras. El corazón del que se ha rendido se ha apagado, ha renunciado a pelear porque cree que no hay ningún posibilidad, y como consecuencia, poco a poco ha dejado de sentir como propio el dolor ajeno. Y es que ese fuego que arde en los corazones que he visto arde no por ellos mismos, sino por el sufrimiento de otros. No son meros espectadores que diagnostican problemas, sino que en muchos casos están implicados en ellos, no les resultan ajenos, por eso se sienten impelidos a hacer algo.

lunes, 24 de febrero de 2014

Atreverse con el amor romántico

Un restaurante elegante, pétalos de rosa, la torre Eiffel, un atardecer... todos tenemos en la cabeza estos y muchos otros elementos que relacionamos inconscientemente con lo romántico. Las siguientes imágenes pueden ser prototipos del romanticismo en estado puro, tal como se suele presentar: 

sábado, 23 de noviembre de 2013

La estructura narrativa de la vida

Escribo este texto a raíz de una conversación sobre la responsabilidad de la propia vida en una actividad de formación como monitor de jóvenes. Y es que es tan cierto como fácil de olvidar que somos seres libres, con capacidad de dar razón del camino que tomamos en la vida. 

Configuramos nuestra vida en cada acción, en cada paso que damos, pero es necesario elevar la mirada, porque si no, nos quedamos en el árbol pero no podemos ver el bosque. Hace falta una mirada profunda hacia nuestro futuro que sea como una flecha que parta de nuestro presente hacia nuestro futuro, pero que también incluya en su cola todo nuestro pasado. Se trata de una unidad de vida, un "plan de viaje",  que como es evidente, como ocurre en muchos viajes, sufrirá imprevistos que cambiarán nuestros planes, pero siempre tendremos ese destino en el horizonte. Igual que Ulises tuvo mil y una desventuras, siempre llevo en su corazón Ítaca, que es lo que da unidad a todo su viaje. Los baches y charcos dificultan nuestro camino, pero no apartan nuestra mirada del objetivo, como el monte en el camino del montañero.

lunes, 16 de septiembre de 2013

Máscara y persona

En su origen, el término persona viene del verbo latino personare ‘resonar’ y se utilizaba en los teatros griegos y romanos para designar las máscaras que los actores llevaban, las cuales tenían una abertura en la boca para lograr un sonido potente y vibrante (de ahí su significado de resonar). Sin embargo, reflexionando sobre ello, creo que precisamente para la comprensión de qué significa ser persona, es muy interesante oponerlo a máscara. Aunque el origen de la palabra persona esté en la máscara, creo que su sentido más propio se vislumbra cuando se opone a ella.

martes, 11 de junio de 2013

Por un ecologismo trascendente

Ser ecologista en nuestros días es políticamente  correcto. Esto es un hecho, al margen de la coherencia en el comportamiento que luego tenga la gente en sus hábitos. Presumir de tener una empresa que te ha hecho rico a base de ensuciar los ríos o masacrar innecesariamente animales, creo que todos estaremos de acuerdo, no está bien visto socialmente. La conciencia ecológica está muy presente en los objetivos educativos y suele ser de los primeros temas que aparecen cuando se habla, generalmente de una forma un tanto ambigua, de "educación en valores".

Esta conciencia ecológica que está tan extendida es algo que considero en sí mismo como un hecho positivo, pero que actualmente tiene dos problemas: una falta de fundamentación de fondo y el ir acompañada con posiciones filosóficas que van más allá del ecologismo, como tesis antropológicas y metafísicas que no se deducen de una postura ecológica. Por esta razón, voy a intentar proponer un ecologismo que no tenga estos dos problemas, o al menos dibujar las líneas por las que creo que podría desarrollarse.

martes, 14 de mayo de 2013

La lógica y el amor


⩝t ∃x ∃y (xy)
Sea el caso donde a = tú y b = yo:
⩝t (♥ba)
Nota: ♥ es un relator diádico que significa amar con locura


El anterior argumento se podría leer: “Para cualquier instante de tiempo t, hay alguien que ama con locura a otro alguien. Dado el caso que el primer sujeto soy yo y el segundo tú, la conclusión es que en cualquier instante de tiempo t estaré en una relación diádica contigo que significa amar con locura, es decir, SIEMPRE TE AMARÉ.”

Si un enamorado le escribe en un tweet a su amada t (♥ba), puede ser que la amada se emocione, aunque también puede ser que no se entere del significado de la fórmula de lógica de primer orden. Sin embargo, de lo que no cabe ninguna duda, es de que el origen de la posible emoción de la amada no estará en el alto grado de conciencia y expresión de su amor que el enamorado ha conseguido a través de la lógica. El origen de la emoción de la amada estará en el propio amor del enamorado, y la lógica no habrá sido más que un medio original de transmitirlo.

miércoles, 10 de abril de 2013

"Lo esencial es invisible a los ojos". La filosofía y la vida: reflexiones a partir de “El Principito”


Aprovechando el reciente 70 aniversario de la gran obra “El Principito” de Antoine de Saint- Exupéry, en esta entrada me gustaría a reflexionar sobre la filosofía y la vida a partir de un texto muy sugerente de esta maravillosa obra:
 “—Vete a ver las rosas; comprenderás que la tuya es única en el mundo. Volverás a decirme adiós y yo te regalaré un secreto.
El principito se fue a ver las rosas a las que dijo:


—No son nada, ni en nada se parecen a mi rosa. Nadie las ha domesticado ni ustedes han domesticado a nadie. Son como el zorro era antes, que en nada se diferenciaba de otros cien mil zorros. Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo.
Las rosas se sentían molestas oyendo al principito, que continuó diciéndoles:
—Son muy bellas, pero están vacías y nadie daría la vida por ustedes. Cualquiera que las vea podrá creer indudablemente que mí rosa es igual que cualquiera de ustedes. Pero ella se sabe más importante que todas, porque yo la he regado, porque ha sido a ella a la que abrigué con el fanal, porque yo le maté los gusanos (salvo dos o tres que se hicieron mariposas ) y es a ella a la que yo he oído quejarse, alabarse y algunas veces hasta callarse. Porque es mi rosa, en fin.

martes, 12 de marzo de 2013

El filósofo buscando la filosofía (reflexión al hilo del pragmatismo filosófico)

Reflexiones breves acerca de cómo posicionarse ante la verdad al hilo del artículo del profesor J. Nubiola Pragmatismos y relativismo: C.S. Peirce y R. Rorty Publicado en Unica. Revista de Artes y Humanidades de la Universidad Católica Cecilio Acosta, II/3, 2001, pp 9-21.

En primer lugar, creo que los dos extremos que se intentan evitar siempre cuando se busca una posición ante la verdad, en realidad no son extremos tan alejados, sino que son las dos caras de la misma moneda. Estoy hablando del dogmatismo y del relativismo. Ambas posiciones, en el fondo, no son afirmaciones gnoseológicas, sino voluntaristas.

jueves, 28 de febrero de 2013

¿Es la filosofía para todos?

Al hilo de una discusión en clase de Filosofía del Lenguaje sobre la filosofía y su lugar, han surgido voces a favor y en contra de que la filosofía sea para todos. Antes de que pudiera responder, se ha agotado el tiempo de intervenir y no he afrontar la cuestión. El problema es que no es una cuestión intrascendente, sino que creo verdaderamente que es una de las claves que debe resolver la filosofía para estar donde debe estar. Por ello, creo que debo intentar decir algo sobre el tema. Sé bien que estas pocas líneas no van a resolver definitivamente nada, pero espero que sea parte de una reflexión acerca de un tema que personalmente me parece vital.
Caspar David Friedrich: El caminante sobre el mar de nubes 


miércoles, 27 de febrero de 2013

Escuchando a Vicente del Bosque. Una lección para la vida


El pasado martes 26 de febrero tuvimos la suerte de poder tener un coloquio con el seleccionador Vicente del Bosque en la Universidad de Navarra. Personalmente siempre he admirado su trayectoria, no tanto por su dimensión deportiva como su dimensión humana. Y estos rasgos profundamente humanos son los que volví a admirar en sus respuestas. Quiero señalar dos frases (podría traer muchas más), que creo que pueden iluminar estos puntos.




“Hay que aprender a ganar además de aprender a perder.”

Una de las primeras cosas que me llamaron la atención fue esta referencia, aparentemente contraria al sentido común. Siempre queremos educar a los niños a saber perder, a aceptar la derrota a través del juego y del deporte, algo que indudablemente tiene un gran valor.

Pero también es cierto que hay que aprender a ganar, y quizás uno revele más de sí mismo en la victoria que en la derrota.
El respeto hacia el vencido y los gestos que se tienen al haber alcanzado la cima suponen la verdadera victoria o la verdadera derrota, porque no hablan del deporte, sino de lo humano. El ser capaz de integrar la fama y el éxito dentro de un proyecto de vida de humildad, respeto y exigencia, es aprender a ganar, es que la victoria no nos construya un ego que ahogue o oscurezca la persona que somos. Y creo que en esto Vicente del Bosque siempre ha sido un ejemplo de comportamiento.

Wittgenstein tropieza al salir de la caverna


Querido Wittgenstein:

Le escribo para hacerle una reclamación sobre su Tractatus: a pesar de pretender haber solucionado los problemas de la filosofía, en realidad la ha vaciado y recortado. Usted somete a un régimen tan extremo a la filosofía en su obra, que no al final no queda más que un esqueleto descarnado, un método que ya no tiene contenido.
Quiero ilustrarle mi crítica con un mito del pasado que quizás no conozca, pero que creo que tiene relación con su intento de resolver los problemas de la filosofía. Le hablo del conocido mito de la caverna del pensador griego Platón. Creo que le hubiera caído bien, también le iba lo de las matemáticas. Tanto es así que en su Academia tiene escrito eso de “que no entre aquí nadie que no sepa geometría”.

viernes, 22 de febrero de 2013

Una última lección del maestro Leonardo Polo: "Ser un buen chico"

El pasado 9 de Febrero se hizo un vacío en el mundo de la filosofía con el fallecimiento de Leonardo Polo.

A uno le tiemblan las manos al escribir algo sobre él, puesto que como joven y estudiante en filosofía,  apenas he empezado a vislumbrar su pensamiento, si bien debo admitir que desde que empecé a oír hablar de él y a leerle, no puede ser indiferente. Además, hay una cosa que siempre me causa admiración: tanto los que están de acuerdo con él como los que no, le tienen un respeto como un profundo pensador. Un gran profesor de la  carrera, Enrique Alarcón, decía de él que era "el hombre con mayor capacidad especulativa que había conocido en vida."